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Falafel y hummus para nuestros paladares.

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¡Bueno, bueno, bueno! ¡¡¡Feliz jueves a todos!!! Hoy nos apetece algo con toques orientales, ¿qué tal preparar falafel? ¿O preferís hummus? ¿Sabéis lo que es?
El falafel se hace en bolitas como croquetas, aunque hay sitios que las ponen como si fuesen mini hamburguesas. Se fríen en aceite de oliva y la base es una pasta de garbanzos y especias junto con algunos vegetales. Se pueden consumir solas como entrante (con alguna salsa) o en pan de pita (con lechuga, tomate, queso, salsa…), nosotros también usamos las tortitas que venden en los súper para hacer burritos y fajitas.
El hummus, sin embargo, es como un puré. No se consume como tal, se unta en pan tostado y está buenísimo. La base también es pasta de garbanzos y especiales, pero no os dejará indiferente.
Os vamos a dejar dos recetas, una de falafel y otra de hummus, para que preparéis en un plis.

Para nuestras bolitas de falafel necesitaremos:

– 2 tazas de garbanzos. En remojo del día anterior.
– 1 cebolla.
– 2 dientes de ajo.
– 2 ramitas de perejil.
– 1 cucharadita de comino.
– 1 cucharadita de pimentón.
– 1 pizca de pimienta.
– 1 pizca de sal.
– Aceite para freír.

Preparación :
Trituráis los garbanzos. Picáis la cebolla, el ajo, el perejil finitos y agregáis a los garbanzos. Añadís el resto de las especias y sal a gusto. Removéis y mezcláis bien para que quede lo más homogéneo posible. Dejáis reposar una hora para que se asiente y combinen los sabores. Hacéis las bolitas y las freís en abundante aceite de oliva.
Nosotros, a veces, cambiamos los garbanzos por lentejas y el sabor no varía demasiado, aunque es un poco más engorroso de hacer. Usamos lentejas de las grandes, las de toda la vida. Pero el sabor es una maravilla.

Para el hummus, que es mucho más rápido y sencillo, necesitaremos:

-Un par de tazas de garbanzos cocidos (o unos 500gr). Podéis usar también de bote, pero se nota el sabor más intenso de los cocidos por vosotros.
-Un par de dientes de ajo.
-El zumito de medio limón.
-Tres cucharadas de aceite de oliva.
-Una cucharadita de comino.
-Una cucharadita de pimentón (a nosotros nos gusta ponerle el picante).
-Una pizca de pimienta negra.
-Sal al gusto.

Preparación:
Esto es lo más fácil de todo: Juntas todos los ingredientes, los pones en el vaso de la batidora y bates hasta que adquiera la textura deseada.
El hummus también se puede triturar a mano y no es nada complicado, tardaréis un poquito más en hacerlo y quedará menos homogéneo pero, por ejemplo a nosotros, nos gusta más así.
Cuando tengáis vuestro puré, colocadlo en un bol y le ponéis de decoración un par de garbancitos de los cocidos, espolvoreáis un poco de pimentón y un chorreoncito de aceite de oliva.
A parte de unas tostaditas, podéis acompañarlo con vegetales cortados para poder «mojar» con ellos.

¡¡Que disfrutéis de estas dos recetillas para hoy!!!